Clara había intentado de todo. Cremas de marca, aceites esenciales y productos prometedores que no entregaban resultados duraderos. Día tras día, luchaba con la piel seca y escamosa que parecía empeorar cada vez que el clima se volvía frío o cálido. Sus manos, rostro y piernas reflejaban una textura áspera que no solo le causaba incomodidad física, sino también una gran inseguridad....
